Los celos son comunes en las relaciones de noviazgo y matrimonio, pero cuando son compulsivos, afectan a la pareja destruyendo la confianza y la estabilidad. Y es que estos van más allá de la simple inquietud ocasional y puede llevar a conductas obsesivas y, en última instancia, dañar irreparablemente la relación.
¿Qué son los celos compulsivos?
Los celos compulsivos se definen como una preocupación constante y excesiva acerca de la posibilidad de que la pareja sea infiel. A diferencia de los celos normales, que surgen en situaciones específicas y suelen desaparecer al poco tiempo, los compulsivos son persistentes y están presentes en todo momento. Incluso, pueden llevar a que las personas experimenten ansiedad, pensamientos intrusivos y comportamientos de control hacia su pareja.
Por supuesto, esto puede tener un impacto devastador en una relación. Sentir que se está constantemente vigilado y que se desconfía, puede llevar a la pareja a sentirse sofocada y resentida, lo que alimenta un círculo vicioso donde la persona se vuelve cada vez más distante, esto, a su vez, aumenta los celos y la desconfianza.
Además, los celos compulsivos pueden llevar a conflictos frecuentes y a problemas de comunicación. La pareja puede sentirse constantemente a la defensiva, haciendo más difícil la resolución de problemas y la construcción de una relación saludable.
Afortunadamente, los celos compulsivos pueden ser tratados con la ayuda adecuada. En este sentido, la terapia de pareja es una herramienta efectiva para abordar este problema, porque permite a las partes involucradas trabajar en conjunto para reconstruir la confianza y mejorar la comunicación. En lugares como Málaga, hay destacados profesionales que ofrecen esta ayuda. De ahí que la terapia de pareja Málaga es una opción excelente para quienes buscan mejorar su relación, superar los celos compulsivos y otras situaciones que les afectan.
Causas de los celos compulsivos
Las causas de los celos compulsivos son tanto diversas como complejas. Algunas de las más comunes son:
- Inseguridad personal: las personas que tienen baja autoestima o inseguridad personal tienen más riesgo de experimentar celos compulsivos. La falta de confianza en sí misma le puede llevar a creer que no es lo suficientemente buena para su pareja, lo que lógicamente alimenta el miedo a que esta le sea infiel.
- Experiencias pasadas: haber vivido anteriormente traición o infidelidad, puede dejar huellas emocionales profundas que hacen que la persona sea más propensa a los celos compulsivos en futuras relaciones.
- Problemas de confianza: a veces, no se confía en la pareja debido a comportamientos sospechosos por parte de esta o una falta de comunicación abierta y honesta en la relación.
- Trastornos mentales: el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) o los trastornos de ansiedad, pueden contribuir a la aparición de celos compulsivos, puesto que las personas que los padecen suelen sobrepensar las cosas o pensar en escenarios negativos. Esto hace que sea necesario que la persona también busque terapia psicológica para tratar estos problemas. Por ejemplo, en gabinetedepsicologiamalaga.com se brinda terapia para la ansiedad, el TOC y otros trastornos.
Síntomas y comportamientos comunes de una persona con celos compulsivos
Las personas con celos compulsivos pueden presentar diferentes comportamientos que resultan dañinos para la relación. Los siguientes son los más comunes:
- Monitoreo constante de las actividades de la pareja, lo que incluye revisar sus mensajes y llamadas, e incluso seguirla físicamente sin que esta se dé cuenta.
- Con frecuencia le hacen preguntas a la pareja sobre su paradero y con quién se relaciona.
- Se sospecha sin motivo de la fidelidad de la pareja, incluso aunque no existan pruebas de que le esté siendo infiel.
- Se aísla a la pareja de amigos y familiares para que no se vea tentado a cometer infidelidad.
¿Cuándo buscar ayuda profesional?
El momento de buscar ayuda profesional es justamente cuando los celos dejan de ser normales y pasan a ser compulsivos, afectando la relación y la calidad de vida de los miembros de la pareja. Señales como estas no deben pasarse por alto:
- Discusiones frecuentes sobre la desconfianza y los celos.
- Uno de los miembros de la pareja se siente aislado o controlado.
- Los celos están causando ansiedad, depresión u otros problemas de salud mental.
- La relación se está deteriorando y ambos se sienten infelices.