La Primera Comunión es uno de los momentos más significativos en la vida de un niño, por lo tanto, hay que organizarla de forma que recuerde la ocasión con cariño, pero esto requiere planificación y preparación adecuadas.
Asegurarse de que cada detalle esté en su lugar garantizará que tanto el niño como los invitados disfruten de esta celebración especial. Para ayudarte a lograrlo, te mostramos los pasos más importantes para organizar una Primera Comunión inolvidable.
#1 Haz una lista de invitados
Comenzar por hacer la lista de invitados te permitirá saber con precisión cuántas y cuáles son las personas que asistirán, lo que facilitará la organización de la recepción y el banquete.
Haz una lista preliminar y luego revísala para asegurarte de no olvidar a nadie importante, por ejemplo, familiares cercanos y amigos íntimos. Piensa si deseas que asistan compañeros de clase, vecinos, familiares lejanos o personas especiales en la vida del niño.
Cuando elabores la lista, toma en cuenta el tamaño del lugar donde se llevará a cabo la celebración para que haya suficiente espacio para todos los invitados. También considera tu presupuesto y cuánto puedes gastar en comida y otros aspectos de la celebración.
#2 Prepara las invitaciones
Cuando definas quienes asistirán, es momento de diseñar y enviar las invitaciones. Estas deben reflejar el tema o el estilo de la celebración y contener información importante, como la fecha, hora y lugar del evento. Además, es recomendable que incluyas instrucciones claras sobre la forma de confirmar la asistencia.
Aunque puedes crear las invitaciones de forma digital, tendrán mayor valor si son invitaciones originales de comunión impresas que puedes personalizar. Una vez que las tienes listas o las hayas recibido si las encargaste, recuerda enviarlas con anticipación para que los invitados puedan reservar la fecha para poder asistir.
#3 Elige el lugar y decora el espacio
Selecciona dónde se celebrará la Primera Comunión. Por ejemplo, puedes celebrarla en una iglesia, en tu hogar o en un salón de eventos. En cualquier caso, el espacio debe ser amplio para la comodidad de los invitados, además, asegúrate de que el lugar se ajuste al ambiente que deseas crear.
Si ya tienes claro el lugar, piensa en la decoración y los distintos elementos que incluirás. Algunas ideas son usar cruces o imágenes sagradas, flores y colores suaves. El objetivo debe ser crear un ambiente cálido y acogedor, que recuerde la solemnidad y significado de la ocasión.
#4 Planifica la ceremonia religiosa
La Primera Comunión es una celebración religiosa, de ahí que sea necesario coordinar con la parroquia o iglesia local para organizar todos los aspectos relacionados con la ceremonia.
Ponte en contacto con el sacerdote o el encargado de la parroquia para discutir los requisitos, las fechas disponibles y las pautas y los protocolos específicos que se deben considerar.
#5 Organiza la recepción y el banquete
Después de la ceremonia religiosa, en muchos lugares es común celebrar una recepción o un banquete en un restaurante o en casa. Si tú también lo harás, planifica el menú y considera las necesidades dietéticas de los invitados.
Además de la comida, si lo ves conveniente, incluye una mesa de postres con pasteles y dulces temáticos. Esta debe ser atractiva y añadir algunos toques personales, como fotografías del niño y elementos relacionados con la Primera Comunión.
#6 Elige la vestimenta adecuada
La vestimenta es uno de los aspectos más importantes de la ceremonia y debe prepararse con suficiente antelación. Normalmente, las niñas llevan vestidos blancos tradicionales, mientras que los niños suelen usar trajes formales o trajes de marinero.
Tanto si se trata de una niña o de un niño, la vestimenta tiene que ser cómoda y adecuada para la ocasión. Si no quieres o no la puedes comprar, tienen la opción de alquilarla.
Por último, como la Primera Comunión es un evento religioso, es apropiado que los niños lleven consigo elementos simbólicos, como un rosario o una cruz.