ONU: los líderes mundiales necesitan un ‘interés propio ilustrado’ para salvar al planeta del cambio climático

El Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, al concluir una visita de una semana al Pacífico Sur, ha hecho un llamamiento a los responsables de la toma de decisiones en el mundo para que tomen decisiones «más claras» sobre la acción climática, porque está en juego «todo el planeta».

«Durante la semana pasada, he sido testigo de primera mano de los impactos del cambio climático en los Estados insulares del Pacífico», dijo el jefe de la ONU en una declaración que concluyó su visita a la región.

«Contribuyen muy poco a la emergencia climática mundial y, sin embargo, son los más afectados».

No se anduvo con rodeos al decir que para algunos de ellos, «el cambio climático es ahora una amenaza existencial».

El Sr. Guterres lamentó que se estén reubicando aldeas enteras, destruyendo los medios de subsistencia y enfermando a la gente de enfermedades relacionadas con el clima: «Los riesgos son demasiado reales».

Llamó la atención sobre su estancia en Tuvalu, donde vio a «todo un país luchando por preservar su propia existencia».

Sin embargo, el jefe de la ONU consideró «notable» que los países que se enfrentan a estos enormes retos, hayan decidido que «no se rinden», sino que están «decididos a encontrar soluciones».

No sólo han desarrollado formas de aumentar su resistencia y adaptación, sino que, según el Sr. Guterres, «están liderando el camino en la reducción de emisiones y son un ejemplo que el resto del mundo debería seguir».

En Vanuatu, su última parada en el Pacífico, el Secretario General tuiteó que el vulnerable estado insular era uno de «los países más propensos a los desastres, agravado por la emergencia climática mundial».

Sin embargo, añadió que «vio de primera mano cómo la nación insular del Pacífico se enfrenta a las amenazas con una acción climática decidida».

Reiterando el poderoso mensaje que ha seguido subrayando a lo largo de su visita al Pacífico Sur, el jefe de la ONU subrayó que «el cambio climático no puede ser frenado sólo por los pequeños países insulares, sino que debe ser frenado por el resto del mundo» y que esto requiere la voluntad política para «políticas transformadoras en materia de energía, movilidad, industria y agricultura».

El Sr. Guterres se hizo eco de los «tres mensajes urgentes» a los líderes mundiales que había «transmitido de manera consistente» durante su visita al Pacífico, comenzando con la transferencia de los impuestos de los salarios al carbono.

«Necesitamos gravar la contaminación, no a la gente», reiteró.

En segundo lugar, señaló que los países deben dejar de subvencionar los combustibles fósiles.

«El dinero de los contribuyentes no debe utilizarse para impulsar los huracanes, propagar la sequía y las olas de calor, derretir los glaciares y blanquear los corales», afirmó.
Y en tercer lugar, argumentó en contra de la construcción de nuevas plantas de carbón para 2020, diciendo: «necesitamos una economía verde y no una economía gris».

El Sr. Guterres dijo que no se busca la solidaridad o la generosidad, sino que «se trata de un interés propio de todos los responsables de la toma de decisiones en todo el mundo», lo que se necesita «porque lo que está en juego no es sólo el Pacífico, sino todo el planeta».

«Salvar el Pacífico es salvar todo el planeta», concluyó el Secretario General.