Reformas de cocina: ¿qué se debe tener en cuenta?

presupuesto reforma de cocina

Las cocinas son de esas habitaciones vitales dentro de cualquier casa o piso. En ellas deben confluir tres factores básicos: comodidad, seguridad y estética. Por eso, a la hora de realizar obras de reformas hay que tener en cuenta diversos factores para que estos tres pilares se cumplan.

A continuación, se darán algunas recomendaciones básicas que se deben observar antes de llamar a los profesionales que se encarguen de este tipo de obras.

1.- ¿Por qué se hace la reforma?

Antes de siquiera buscar un presupuesto de reforma de cocina en Valencia hay que detenerse y preguntarse por qué se ha decidido hacer los trabajos. ¿Se necesita modernizar el espacio?, ¿hacerlo más amplio, iluminado y ventilado?, ¿se requiere más espacio de almacenamiento?, ¿se trabajará el concepto abierto hacia el salón y/o el comedor?

Al responder estas y otras preguntas puede clarificarse el panorama de lo que se pretende lograr. Esto es fundamental y determinará todo el trabajo, así como los materiales, la distribución del espacio y mucho más.

2.- Contar con profesionales

Mucha gente comete el error garrafal y sin vuelta atrás de diseñar un propio proyecto de reformas con tan solo ver algunas fotos y decirle al albañil que se desea algo parecido. Esto jamás se debe hacer.

Cada cocina es única y tiene sus propios puntos de agua, luz y dimensiones. Por eso, se recomienda llamar a una empresa que sepa de todo esto y pueda sacar el mejor provecho posible a cada elemento estructural de la cocina.

La empresa RDG Reformas, con sede en la ciudad de Valencia es especializada, no solo en reformas de cocinas de diseño, sino de baños y trabajos integrales en cualquier parte de la casa o sitios de trabajo. Se encargan de obras en pisos, chalets y todo tipo de viviendas o espacios que lo requieran.

Esto es primordial. Los expertos de este tipo de empresas hacen una evaluación técnica y especializada para la cual no todo el mundo está capacitado.

En función de esto diseñan proyectos a medidas para que la cocina cubra las necesidades de esa familia en particular. Para ello toman en cuenta la orientación de la estancia y así aprovechar la luz natural.

Además, priorizan el diseño de acuerdo con el uso de la cocina, la cantidad de personas y las particularidades estructurales del espacio en general.

3.- Hacer una lista y un plano para mostrar a los expertos

Antes de llamar a la empresa de reformas es conveniente hacer una lista y un plano (así sea muy sencillo) de lo que se quiere lograr con la reforma.

En función de eso, los expertos trabajarán la idea tomando en consideración los aspectos técnicos y de la propia edificación y del inmueble y harán lo más parecido al proyecto que los dueños de la cocina necesitan.

Lo bueno de conversar lo que se quiere con los diseñadores de cocina es que estos pueden dar consejos (con base en el plano y el listado) de cómo optimizar lo que se tiene en mente y sacar el mejor provecho al presupuesto con los materiales de más óptima calidad que se puedan comprar con el dinero disponible.

4.- Tomar en cuenta los posibles imprevistos

Cuando se van a hacer trabajos de reformas, no solo en la cocina, sino en cualquier parte, hay que prever cualquier situación que retrase los trabajos o que requiera invertir un poco más de dinero. 

Por ejemplo, puede darse el caso de que al comenzar a derrumbar paredes o quitar muebles y electrodomésticos, se descubra un cableado en mal estado o una tubería que debe reemplazarse.

Este tipo de inconvenientes impactan no solo en el presupuesto, sino en el tiempo que durarán los trabajos. Por eso, hay que reservar una parte del dinero y disponer de días adicionales.

Si nada de esto sucede se pueden emplear tanto los recursos económicos como el tiempo en comprar una nueva tostadora o hacer una fiesta de inauguración de obra.