La solvencia financiera de una empresa es el eslabón clave cuando se habla de éxito comercial, habiendo de volcar todas las energías disponibles para mantenerla intacta con el paso de los años. No obstante, este valor económico no depende exclusivamente de la gestión corporativa, sino también del correcto comportamiento de los clientes. Si estos dejan de pagar las facturas, la estabilidad del negocio se puede ver afectada de forma drástica. Motivo por el que resulta fundamental analizar en detalle qué medios tenemos disponibles para plantar cara a la morosidad de terceros en aras de mantener intacta la contabilidad de la compañía.
Pasos generales para reclamar la deuda
En caso de sufrir los efectos financieros de tener clientes que no pagan las facturas contraídas, entonces es esencial saber cómo actuar en cada caso. El primer paso que debes dar para cobrar una deuda es el de verificarla, estableciendo así la cantidad concreta y revisando los registros de facturación. Con esta información, comunícate con el deudor para informarles de la deuda en cuestión.
Puede que el deudor no sea capaz de abonar toda la cantidad en el acto. Bien, en estos casos la mejor vía es la amistosa. Plantea un plan de pago para que pueda asumir el coste total en varias cuotas. Eso sí, deja por escrito este pacto para así evitar problemas a posteriori; ya que no es raro que los morosos pasen por alto dicho acuerdo.
Si todo lo anterior no ha servido de nada, entonces toca buscar apoyo legal. Lo mejor es que delegues funciones en un abogado especializado en el cobro de deudas, quien se pondrá manos a la obra para seguir todas las regulaciones vigentes en la materia. Si se llega a juicio y se demuestra el impago, lo más probable es que el deudor tenga que abonar la cantidad con ciertos intereses.
Delega en expertos de cada país
En un mundo tan globalizado como el actual es muy habitual que los negocios tengan sede en varios países. Puesto que la reclamación de impagos es algo asociado al derecho y cada región tiene sus propias normas, toca recurrir a expertos en cada lugar del planeta. Es decir, no es lo mismo tener deudas en España que tener deudas en el Reino Unido.
Con esto en mente, haz un repaso exhaustivo sobre las agencias de cada zona en la que operes y que haya morosos que están poniendo en jaque la integridad de tu empresa. Al hacerlo, recibirás una gestión impecable y fundamentada en las bases del derecho del país en cuestión, asegurando los mejores resultados posibles en cada caso.
Además, hay que señalar que hoy en día hay agencias en regiones como Reino Unido que se encargan de asumir por completo la deuda que tiene pendiente de cobro tu negocio. Es decir, ellos te “comprarán” dicha deuda para darte la liquidez que necesitas y, posteriormente, asumirán las reclamaciones pertinentes con tus clientes.
No dejes sin cobrar tus facturas
Tener que enfrentar a un tercero que se niega a pagar lo que te debe no es nada agradable. No obstante, es inviable no hacerlo; razón por la que es imperativo estudiar en detalle en qué expertos puedes delegar a la hora de reclamar una factura impagada. Unos especialistas que gestionarán el caso de forma ejemplar para obtener los mejores resultados.
La verificación de la validez de la deuda, la comunicación con sus respectivos recordatorios amistosos y el seguimiento formal serán realizados por especialistas de primera categoría. De hecho, si la situación lo permite, también serán los encargados de encontrar medios alternativos para la resolución de este conflicto.En cuanto a las acciones legales, se puede recurrir a la vía extrajudicial o mediante un proceso monitorio. Sea como sea, no permitas que un tercero trastoque los esquemas económicos de tu empresa y asegúrate de tener la mejor defensa posible. Antes de que te des cuenta, habrás percibido lo que te mereces para así continuar con tu actividad libre de impagos.